Casi cuatro años pasaron para qué la Comisaría del Humo se pintara nuevamente.
La última vez qué se pintó, fue en el mes de julio de 2008. Mauro A. Sarabia
Peña siendo comisario municipal, apoyado por el Movimiento Juvenil Humo, se
encargó de renovar con pintura la fachada de la Comisaría.
No obstante, el tiempo, las altas temperaturas de los rayos solares, fueron menguando la buena visión qué mostraba el inmueble recién pintado. Así, pasaron dos comisarios y ya la Comisaría empezó seriamente a deteriorarse en su pintura, situación qué se acrecentó notablemente desde hace una año. La fea visión qué ya se veía en el inmueble, orilló a la Hoja, órgano informativo de dpfusión local, a llamar a la Comisaría, La Casa de los Espantos y frecuentemente, se exhortó al comisario municipal a pintarla.
Tan es así, que en el No. 30 de La Hoja, de diciembre de 2011, reportó lo qué el comisario dijo: “La Comisaría se va a pintar, antes de que venga el turismo”, esto fue afirmado por el comisario municipal Rodrigo Pineda Pino.
La Autoridad local lo aseveró al finalizar la Asamblea que se desarrolló el viernes 25 de noviembre. A la pregunta de a qué se refería con lo de “turismo”, aclaró: “El turismo, son los vacacionistas”. “Ya cuando ellos lleguen, va a estar pintada, ya platiqué con Tomás”.
Pasó diciembre y no se pintó, allí quedó mal con su palabra. El comisario municipal no cumplió. Pero pasó enero, febrero, marzo y abril y con ello las vacaciones de semana santa, los turistas que dijo el comisario Yigo, volvieron al Humo y la Comisaría sin pintar, se fueron y la Comisaría sin pintar. Ya para ese momento, la Comisaría, constituía una vergüenza verla así, toda jodida y dando un mal y feo aspecto.
Sin embargo, todo ello, era visto por todos, menos por el comisario o por ambos comisarios. A propósito, El Humo cuenta con un comisario municipal y a un presidente del Comisariado Ejidal. Los dos tienen la obligación de mantener la Comisaría, en condiciones bonitas y óptimas, por qué la Comisaría se usa indistintamente, pero esto no sucedió.
Bajo este escenario, Mauro A. Sarabia le solicitó a Agustín Sotelo Aguilar, pintura para la Comisaría, en su visita qué realizó el del Paraíso al bitado barrio atoyaquense, cuando este era pre – candidato del PRD al Ayuntamiento de Atoyac de Álvarez. Allí estaban los comisarios del Humo, pero no dijeron nada.
Así, es hasta el 4 de abril pasado, en que Agustín Sotelo v fue al Humo a entregar tres botes de 4 galones cada uno, mismos qué este fin de semana sirvieron para recuperar la brillantez, injustamente abandonada y olvidada por los comisarios. Curiosamente, Mauro A. Sarabia, junto con el MJH, pintó nuevamente la Comisaría, ante el desdén y el menosprecio de los comisarios por tenerla bien.
Finalmente, se pintó.
No obstante, el tiempo, las altas temperaturas de los rayos solares, fueron menguando la buena visión qué mostraba el inmueble recién pintado. Así, pasaron dos comisarios y ya la Comisaría empezó seriamente a deteriorarse en su pintura, situación qué se acrecentó notablemente desde hace una año. La fea visión qué ya se veía en el inmueble, orilló a la Hoja, órgano informativo de dpfusión local, a llamar a la Comisaría, La Casa de los Espantos y frecuentemente, se exhortó al comisario municipal a pintarla.
Tan es así, que en el No. 30 de La Hoja, de diciembre de 2011, reportó lo qué el comisario dijo: “La Comisaría se va a pintar, antes de que venga el turismo”, esto fue afirmado por el comisario municipal Rodrigo Pineda Pino.
La Autoridad local lo aseveró al finalizar la Asamblea que se desarrolló el viernes 25 de noviembre. A la pregunta de a qué se refería con lo de “turismo”, aclaró: “El turismo, son los vacacionistas”. “Ya cuando ellos lleguen, va a estar pintada, ya platiqué con Tomás”.
Pasó diciembre y no se pintó, allí quedó mal con su palabra. El comisario municipal no cumplió. Pero pasó enero, febrero, marzo y abril y con ello las vacaciones de semana santa, los turistas que dijo el comisario Yigo, volvieron al Humo y la Comisaría sin pintar, se fueron y la Comisaría sin pintar. Ya para ese momento, la Comisaría, constituía una vergüenza verla así, toda jodida y dando un mal y feo aspecto.
Sin embargo, todo ello, era visto por todos, menos por el comisario o por ambos comisarios. A propósito, El Humo cuenta con un comisario municipal y a un presidente del Comisariado Ejidal. Los dos tienen la obligación de mantener la Comisaría, en condiciones bonitas y óptimas, por qué la Comisaría se usa indistintamente, pero esto no sucedió.
Bajo este escenario, Mauro A. Sarabia le solicitó a Agustín Sotelo Aguilar, pintura para la Comisaría, en su visita qué realizó el del Paraíso al bitado barrio atoyaquense, cuando este era pre – candidato del PRD al Ayuntamiento de Atoyac de Álvarez. Allí estaban los comisarios del Humo, pero no dijeron nada.
Así, es hasta el 4 de abril pasado, en que Agustín Sotelo v fue al Humo a entregar tres botes de 4 galones cada uno, mismos qué este fin de semana sirvieron para recuperar la brillantez, injustamente abandonada y olvidada por los comisarios. Curiosamente, Mauro A. Sarabia, junto con el MJH, pintó nuevamente la Comisaría, ante el desdén y el menosprecio de los comisarios por tenerla bien.
Finalmente, se pintó.
